La batería del coche en invierno

Todavía inmersos en la temporada invernal, esta época es dura para todos los elementos de un automóvil, pero sobre todo el elemento que más sufre averías en estos meses fríos es la batería.

Según la CEA (Comisariado Europeo del Automóvil) hasta un 23% de las averías en un vehículo durante el invierno vienen dadas por fallos en la batería; aunque muchas veces es debido a la dejadez de los usuarios al evitar pasar por el taller para ahorrarse los costes de la revisión.

Es por ello que vamos a repasar las recomendaciones de la CEA para la batería del coche en invierno:

• Es necesario comprobar la carga de la batería antes del invierno y si esto fuese necesario cambiarla.
• El mayor número de averías durante estas fechas pueden ser fácilmente prevenidas con revisiones periódicas y ciertas precauciones. La batería, como ya hemos dicho, sufre mucho más en invierno y si quieres hacer que dure lo máximo posible, intenta que el coche duerma en un lugar con poca humedad y evita dejar las luces encendidas.
• No está de más llevar un juego de pinzas para poder arrancar el coche si este nos deja tirados en algún momento, además hay que saber como ponerlas para arrancar el coche y así evitar problemas. En caso de tener que utilizar las pinzas para arrancar el coche es recomendable un paso por el taller para sustituir la batería cuanto antes mejor.
• También tenemos que vigilar la antigüedad de la batería ya que estas tienen un pedido de uso de unos cuatro o cinco años siempre que se realice un mantenimiento sencillo. Un elemento que tiene también que revisarse para permitir que la batería nos dure el tiempo máximo es el alternador, ya que este es el elemento que carga la batería.

Aunque no siempre es la batería el causante de las averías en invierno, según la CEA un 16% de los conductores aseguraron que su coche se paró mientras circulava; un 15% fueron debidas a fallos en el motor y un 6% fueron problemas eléctricos.

Además de todo esto en esta época hay que llevar cadenas para el coche si fuese necesario así como saber cómo se montan en las ruedas.

También tenemos que acomodar nuestra conducción para lidiar con las condiciones meteorológicas cambiantes que nos podemos encontrar en invierno, como nieve, hielo, viento y niebla que influyen directamente en la conducción.

Parkevoa